NUEVA YORK (Reuters Health) – Una revisión de una amplia base de datos estadounidense desestimó la posibilidad de un incremento en la incidencia de conductas anormales o problemas psiquiátricos en las personas tratadas con el antigripal de Roche Tamiflu, indicaron investigadores.

No obstante, un análisis que observó desórdenes específicos del sistema nervioso central reveló una tasa significativamente mayor de trastornos del ánimo «episódicos» entre los pacientes con gripe que tomaron Tamiflu, u oseltamivir, comparado con quienes no recibieron el medicamento antigripal.

La revisión fue dirigida por los doctores James R. Smith, de la compañía Hoffman-La Roche en Basilea, Suiza, que brindó financiación para el estudio, y el doctor S. Sacks, de Hoffman-La Roche en Nutley, Nueva Jersey.

En los últimos años, hubo informes de casos de episodios psiquiátricos que ocurrieron generalmente dentro de las 48 horas del inicio de los síntomas de gripe y el comienzo del tratamiento con Tamiflu, sobre todo en menores de 17 años.

Esto impulsó a la Administración de Drogas y Alimentos de Estados Unidos (FDA por su sigla en inglés) a sumar en el 2006 una advertencia a la etiqueta del fármaco contra la influenza, que establecía que debían controlarse las señales de conducta anormal inmediatamente después de comenzar la terapia con Tamiflu.

En un estudio retrospectivo, los doctores Smith y Sacks buscaron datos de registros médicos que indicaran «eventos» psiquiátricos en 60.267 pacientes con influenza a los que se había recetado Tamiflu entre noviembre de 1999 y abril del 2005.

Los investigadores también evaluaron a otros 175.933 pacientes con gripe que no recibieron medicación durante el mismo período.

El equipo informó en International Journal of Clinical Practice, que Tamiflu «no pareció» elevar el riesgo de ninguna condición neuropsiquiátrica o de la amplia mayoría de los diagnósticos del sistema nervioso central individuales evaluados.

Sin embargo, en las personas menores de 17 años, la tasa de «desórdenes del ánimo episódicos» fue mayor entre los consumidores de Tamiflu que en aquellos que no tomaron el fármaco.

La tasa absoluta fue del 0,22 por ciento en las personas tratadas con Tamiflu, comparado con el 0,12 por ciento entre quienes no recibieron terapia farmacológica antiviral, según indicó el informe.

FUENTE: The International Journal of Clinical Practice, abril del 2009