La ópera prima de Abel García Roure, ‘Una cierta verdad’, presenta en algo más de dos horas las historias de cuatro internos con distintos cuadros clínicos.

     
La ópera prima de Abel García Roure, ‘Una cierta verdad’ -que se estrena hoy en el cine Boliche de Barcelona, el Luchana de Madrid y el Albatros de Valencia- retrata en forma de documental la esquizofrenia a través de cinco casos reales que se entrecruzan en el servicio de salud mental del hospital Parc Taulí de Sabadell (Barcelona). “Buscaba escenas cotidianas y suficientemente reveladoras para que se pueda atisbar como funciona la enfermedad”, afirma Abel García, cuyo objetivo ha sido en todo momento crear una película “coral” donde se reflejen las distintas patologías de esta enfermedad tan “compleja”.

El documental presenta en algo más de dos horas las historias de cuatro internos con distintos cuadros clínicos –Javier, Bernat, Rosario y Alberto- y sigue muy de cerca su implicación en el tratamiento y su relación con los psiquiatras del centro. “Buscaba trasladar episodios cotidianos de los que sufren psicosis para que nos pongamos en su piel”, dice el director del documental que ha confesado sentirse interesado por la enfermedad desde su época de estudiante cuando ya dedicó un trabajo de documental a la temática.

El proceso ha sido largo y el equipo de rodaje –de pequeñas proporciones para facilitar su trabajo en el centro hospitalario- ha convivido durante tres años con los internos y el personal médico para poder “trasladar al espectador la incomodidad de esta dolencia, que tiene muchas caras”, explica el director.

Gracias a la complicidad de los psiquiatras, García Roure estableció vínculos entre médicos y pacientes “en una delicada situación social, para después, realizar un retrato ajustado de su realidad”.

Pero aunque la realidad que se describe es muy dura, también hay momentos que roza la hilaridad y consiguen provocar la risa entre el público, especialmente en los diálogos de Javier, uno de los pacientes, que demuestran que la lucidez y la cordura no están forzosamente reñidas con la enfermedad.

Una cierta verdad supone el debut como director de Abel García Roure que ya cuenta con una dilatada carrera de ayudante de dirección en películas como ‘En construcción’ de José Luis Guerin, ‘El cielo gira’ de Mercedes Álvarez o ‘La leyenda del tiempo’ de Isaki Lacuesta. El documental, que cuenta con el asesoramiento de respetados profesionales de la medicina psiquiátrica, se presentó en la pasada edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid, donde compitió por la Espiga de Oro, y recientemente ha participado en el festival Internacional de Cine Documental y de Animación de Leipzig.

 Información de “El periódico” 8-05-09

Por  Alan Giménez (Barcelona)